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La corrupción del gobierno de Cuauhtémoc Blanco Bravo no sólo se dio en el ámbito estatal, alcanzó cifras récord a nivel de los recursos federales.

De acuerdo con los informes de la Auditoría Superior de Fiscalización (ASF) hay una historia de desfalcos millonarios a lo largo de todo su sexenio.

En 2019, el primer año completo de su gestión, la ASF encontró un hueco en las finanzas de 2 mil 200 millones de pesos. mil 850 millones de ese monto no se sabe a qué se aplicaron. Nunca hubo rendición de cuenta sobre esos recursos.

En 2020 el faltante detectado por la ASF llegó a 509 millones de pesos; al año siguiente los recursos que no se justificaron en su aplicación alcanzaron los 403 millones de pesos; en 2022, fue-ron al menos 46 millones de pesos y para 2023 la suma siguió aumentando con otros 804 millones de pesos, según cifras oficiales.

En total estamos hablando de un monto de 3 mil 994 millones de pesos, lo que significa un 10 por ciento del total del presupuesto programado en un año para el estado de Morelos. Y todavía falta de contabilizar el 2024 que fue el “año de Hidalgo”, donde los desvíos pueden incrementarse en sus montos y frecuencias.

Hasta noviembre pasado, según la ASF, estos montos derivados de 114 observaciones realizadas a los ejercicios presupuestales de esos años todavía no eran solventadas, por lo que sus procesos seguían avanzando.

Cuauhtémoc Blanco Bravo fue uno de los nueve gobernadores que entregaron el poder el año pasado. Al mismo tiempo fue el mandatario, de esos nueve, que más observaciones acumula por parte de las autoridades a su manejo presupuestal.

A ello hay que sumarle los efectos de esas acciones de corrupción en las personas. Sólo revisemos la parte de la pobreza y la desigualdad, dos aspectos que deberían estarse reduciendo y que con el gobierno pasado aumentaron drásticamente.

Tomemos los datos oficiales más recientes, los de 2022. En México, según el Coneval (que ya desapareció, por cierto), estableció que la población en pobreza ese año era de 49.3 por ciento, en Morelos fue de 50.9 por ciento.

Es decir, más de la mitad de la población de la entidad se encuentra en la pobreza, mientras que los personajes que la gobernaban en ese año habían desviado miles de millones de pesos. A ello hay que sumarle lo criminal de la pandemia, pues cuando ésta ocurría, en Morelos el gobierno de Cuauhtémoc Blanco desviaba casi mil millones de pesos. Repugnable.

Facebook: @JaimeLuisBritoV