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El presidente municipal de Cuernavaca, José Luis Urióstegui Salgado, acompañado de su esposa, Luz María Zagal Guzmán, presidenta del Sistema Municipal DIF Cuernavaca, encabezó este miércoles la creación de un nuevo mural en la sede Papagayo del Ayuntamiento, en el que niñas, niños y adolescentes plasmaron las huellas de sus manos, dejando un mensaje de alegría, sueños y esperanza para la ciudad. Esta obra simboliza el reconocimiento a su importancia en la vida comunitaria.

En compañía de la síndica municipal, Paula Trade Hidalgo; de las regidoras Elia Ortiz García, Arnett Jiménez Gaspar, Miriam Barajas Basilio y Erika Lastra Jaimes; de los regidores Hugo Barón Pulido y Gabriel Rivas Ríos; de la secretaria de Desarrollo Humano y Participación Social; Sandra Pinzón Sánchez, y del secretario del Ayuntamiento, Óscar Cano Mondragón, el alcalde expresó que este mural es más que una obra artística: es un acto de justicia social que refleja una política pública que reconoce a la infancia y la adolescencia como agentes clave en la construcción de una ciudad más justa, inclusiva y participativa, al brindarles espacios de expresión y diálogo.

Urióstegui Salgado agradeció la colaboración de instituciones educativas y docentes que hicieron posible la participación de las y los estudiantes, subrayando que esta actividad representa el firme compromiso del Ayuntamiento de trabajar por un futuro con mayores oportunidades para las nuevas generaciones.

Cabe destacar que este mural se suma a la obra recientemente inaugurada “Inclusión y Diversidad”, también ubicada en la sede Papagayo. Esta pieza rinde homenaje a la riqueza humana de Cuernavaca y fue realizada por la joven y talentosa muralista morelense Andrea González Pérez Tenorio, quien se inspiró en rostros reales de personas con discapacidad para enviar un poderoso mensaje: la diversidad no solo se respeta, se celebra.