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Muertes de Aurora, de Gerardo de la Torre - Foto: Foto: Especial

Platiquemos de libros: Muertes de Aurora

Muertes a Aurora, libro de Gerardo de la Torre, primera edición, publicado por Ediciones de Cultura Popular, en 1980; sexta edición por Luna Media Comunicación, SA de CV, Ciudad de México. México, en julio de 2018

Por: Carlos Garza Falla, Visitas: 1848

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A Muertes de Aurora llegué en noviembre de 2019 vagando por una de las sucursales de la librería Educal, en el Museo de la Cultura Maya de Chetumal, Quintana Roo.

En ese momento desconocía absolutamente todo sobre Gerardo de la Torre, su autor, y por su puesto sobre la relevancia de su obra.

Lo primero que retuvo mi atención fue la portada, en la cual se anuncia que se trata de un libro referido a los acontecimientos del 2 de octubre del 68; acto seguido lo tomé en mis manos y mi atención se concentró en su contraportada donde me tropecé con el siguiente texto firmado por José Woldenberg: “Muertes de Aurora es una de las obras más conmovedoras que he leído. En un universo delirante, alcoholizado, opresivo, se desarrollan las historias de unos trabajadores petroleros que tienen como espacio vital el movimiento estudiantil de 1968. Pero lejos del canto épico y edificante, de la novela pedagógica y panfletaria, el autor construye un ambiente sórdido, un laberinto sin salida, un espejo de la degradación no solo de la política sino de las relaciones humanas”.

Esta novela sobre el 2 de octubre y que José Woldenberg la calificó como “una de las obras más conmovedoras” que ha leído, fueron razones suficientes para adquirirla y leerla en un santiamén.

He demorado el dedicarle un Platiquemos de libros aquí en Masiosare porque al terminar la lectura, que disfrute mucho, me quedé con la curiosidad de conocer más a su autor y he dedicado algún tiempo a esa tarea, la cual espero se vea reflejado en este texto.

Pero vamos por partes.

Primero voy a platicar un poco de Muertes de Aurora, acto seguido platicaré algo de lo que he descubierto en relación a quién es Gerardo de la Torre y su importancia en el universo de la literatura mexicana contemporánea, para en un tercer momento recapitular un poco y dar entrada al enunciado de algunos links de interés donde el lector puede encontrar información sobre este espléndido autor.

Muertes de Aurora es una novela que capta la atención del lector desde el inicio, el narrador te va apresurando a seguir con curiosidad y atención.

En la dedicatoria del libro, el que leí sin saber nada de su autor, dice: “La novela narra la participación de los trabajadores petroleros en este movimiento.” Se refiere obviamente al del 68. Referencia que despertó en mí curiosidad, ya que era la primera noticia que yo tenía de esa participación.

El protagonista de Muertes de Aurora es Jesús de la Cruz. Desde el inicio uno se entera que él es alcohólico y que su alcoholismo será uno de los ejes narrativos.

 Pero, ¿quién es Jesús de la Cruz?

Jesús de la Cruz es “… un antiguo trabajador petrolero que había sido despedido por sus acciones sindicales de 1958 a 1960. En el 68 “vegeta” en un rutinario trabajo de oficina. Está continuamente alcoholizado, y en las crisis evoca a Aurora, su esposa fallecida,” nos dice Edith Negrin en su artículo: Estudiantes y obreros en el68. Muertes de Aurora de Gerardo de la Torre.

Un segundo dato que aporta Edith Negrin en el artículo citado, es que se trata de un personaje que tuvo su debut en la primera novela de Gerardo de la Torre titulada Ensayo General.

El alcoholismo de Jesús de la Cruz es un eje narrativo en Muertes de Aurora, donde emergen dos planos, el de la semi sobriedad y el de las alucinaciones.

En el plano de la semi sobriedad Jesús se relaciona con unos excompañeros de trabajo, más jóvenes que él y petroleros aún, que lo buscan precisamente para que los oriente en su pretensión autentica de sumarse al movimiento estudiantil. Y es aquí donde se va dando cuenta precisamente de lo que podríamos identificar cómo el episodio de la participación de un grupo de trabajadores petroleros en el movimiento estudiantil del 68. Participación no exenta en su propio ámbito, de autoritarismo y de represión.

En el plano de las alucinaciones -dice Edith Negrin- “El hombre (Jesús de la Cruz) evoca o inventa el fallecimiento de su esposa, de distintas maneras y en variados contextos, pero siempre con violencia. Aurora aparece durante episodios de delirio en que el protagonista se siente acosado por moscos, aves, vampiros y chinches: Aurora es estudiante y muere en la plaza de Tlatelolco; Aurora muere cuando es una campesina vietnamita cuya aldea es bombardeada con napalm; Aurora muere torturada por la policía en una cárcel; Aurora muere cuando siendo una esclava que trata de huir es atacada por perros; Aurora muere al dar a luz, como murió la esposa del autor”.

Negrin concluye su artículo señalando que Aurelia Gómez Unamuno, otra estudiosa de la obra de Gerardo de la Torre,  en su artículo Muertes de Aurora: El ángel caído de la historia, o la memoria delirante. Publicado en la Revista Iberoamericana Julio diciembre 2013

"Que parte de lo que se lee en Muertes de Aurora es que hay una incomunicación absoluta entre el sector universitario y el obrero. Diagnóstico que en mucho fue cierto, - añade Negrín- pero se trata de una novela que, aunque triste y derrotista, no plantea situaciones absolutas: Aurora nunca muere del todo, pues su imagen regresa una y otra vez. Tal vez porque Jesús, como Gerardo de la Torre, no quieren renunciar a la esperanza.”

Muertes de Aurora se lee con gusto y avidez y ello se debe a que sin duda hay oficio literario en quien la escribe, pero no solo ello, también hay pasión y compromiso con la causa de quienes en 1968 tomaron las calles del entonces Distrito Federal.

Concluida la lectura de Muertes de Aurora y ya de regreso en la CDMX, me di a la tarea de averiguar quién era Gerardo de la Torre y su paso por el universo de la literatura mexicana contemporánea, y la verdad me vi deslumbrado ya que me topé con un escritor que se construyó como tal de manera peculiar y que cuenta con una obra sólida y respecto de la cual todo me lo sugiere como un próximo y atractivo proyecto de lectura.

Gerardo de la Torre nació en la Ciudad de Oaxaca el 15 de marzo de 1938, días antes de la expropiación petrolera y nació ahí porque ahí radicaba la familia de su madre, ya que el lugar de residencia de sus padres era Minatitlán, Veracruz, donde su padre trabajaba en las oficinas de El Águila. 

En el año de 1945 cuando Gerardo contaba con 7 años, su padre consiguió ser trasladado a la refinería de Azcapotzalco en la capital del país, para esas fechas ya contaba con dos hermanos varones y una hermana. Concluyó la educación primaria e inició un accidentado transitar por el siguiente nivel educativo, el cual pese a diversos intentos no concluyó nunca.

Lo que resaltan quienes se refieren a esta etapa de la vida de Gerardo de la Torre es que su rechazo es a la escuela, no al estudio y al aprendizaje, ya que hay evidencias de que el dedica su tiempo a leer y a estudiar cosas que le interesan. 

En septiembre de 1953 - a los 15 años de edad- se incorporó como trabajador aprendiz en el taller de tubería de la refinería de Azcapotzalco e intentó concluir el tercer año de secundaria, pero no lo logró.

En una entrevista que Jesús Nieto Rueda le hizo para la elaboración de su tesis de licenciatura en Sociología, titulada: “Gerardo de la Torre y “El vengador”, una aproximación sociológica.” http://132.248.9.195/ptd2009/mayo/0643212/Index.html Gerardo de la Torre se refiere a esta época de su vida de la siguiente manera: “Me eché medio tercero, luego me salí. Era muy difícil andar con amigos, con dinero en la bolsa, primeros tragos y seguir en la escuela. Seguía yo leyendo. Me gustaba, pues, aprender. Lo que no me gustaba era ir a la escuela, de eso me di cuenta.” 

Lo que a partir de ese momento resulta peculiar es que el continúa formándose de manera autodidacta y en espacios de la llamada educación informal. Participó con el dramaturgo Carlos Ancira con quien dice “escribí mis primeras obras de teatro, sin tener idea, pero las escribí.”

En 1959 ingresó al Parido Comunista y “ahí empezó otra formación, - dice -  ya no la formación de revolucionario, que de revoltoso tenía yo el alma y el espíritu y todo lo demás, pero no sabía marxismo y ahí me comenzaron a poner a estudiar.”

Posteriormente, sin dejar su trabajo en Pemex, ni su militancia en el Partido Comunista Mexicano se involucró de forma muy intensa en el taller de literatura de Juan José Arreola, al que se refiere en los siguientes términos:  “El taller de Arreola, lo que nos enseñaba por encima de todas las cosas, no era a imaginar; él nos enseñaba a cultivar el amor por las palabras, la artesanía de las palabras, y hasta la fecha lo sigo, me gusta mucho la precisión, el ritmo. Lo que me gusta fundamentalmente es contar cosas políticas, cosas que pasan en la vida de la gente, cosas a veces muy violentas, sobre todo las luchas sociales″. Boletín INBAL  1º de marzo del 2018 https://inba.gob.mx/prensa/8427/lo-que-me-gusta-fundamentalmente-es-contar-cosas-que-pasan-en-la-vida-de-la-gente-gerardo-de-la-torre

De acuerdo con la información que aparece en Wikipedia la obra publicada de Gerardo de la Torre es la siguiente:

Libros de cuentos: El otro diluvio (1968); El vengador (1973) Viejos lobos de Marx (1981); Relatos de la vida obrera (1988); La lluvia en Corinto (1993); Tobalá y otros mezcales oaxaqueños (1998); De amor la llama (2001); La casa del mono y otros crímenes (2002).

Novelas: Ensayo general (1970); La línea dura (1971); Muerte de Aurora (1980); Hijos del águila (1989); Los muchachos locos de aquel verano (1994); Morderán el polvo (1999); Nieve sobre Oaxaca (2010); La descendencia del mayor Julio Novoa (2015); La muerte me pertenece (2015)

Otros libros: No juegues con fuego... sobrenatural (Argumento para el cómic Fantomas publicado el 11 de diciembre de 1976); Antología personal (1996); El guion: modelo para armar (2003); Instantáneas (2019).

De la Torre deja Pémex en 1970 y es a partir de entonces que se dedica de tiempo completo a escribir, involucrándose como tal en la televisión y el cine.

Muertes de Aurora fue para mí en sí misma una novela de contenido muy relevante, bien escrita y con una narración muy bien construida, pero hoy con lo que me quedo es con el deseo de conocer más a Gerardo de la Torre, un escritor del que sin duda abrevarán futuras generaciones para mejor comprender este momento histórico de México.

Concluyo invitando a mis lectores a leer Muertes de Aurora y a conocer a Gerardo de la Torre atreves de su obra.

 

Referencias

Boletín INBAL, 1º de marzo del 2018. Lo que me gusta fundamentalmente es contar cosas que pasan en la vida de la gente׃ Gerardo de la Torre.

Gerardo de la Torre. Wikipedia.

Gerardo de la Torre. Nota Introductoria de Silvia Molina.  Material de Lectura. UNAM. Coordinación de Difusión Cultural. Dirección de Literatura. México 2010. 

Negrin Edith. Estudiantes y obreros en el 68. Muertes de Aurora de Gerardo de la Torre. Senderos Filológicos. Instituto de Investigaciones Filológicas de la UNAM. Julio – Diciembre 2019.

Gómez Unamuno Aurelia. Muertes de Aurora: El ángel caído de la historia, o la memoria delirante. Revista Iberoamericana Julio diciembre 2013

Nieto Rueda Jesús. Gerardo de laTorre y 'El vengador', una aproximación sociológica. Tesis presentada para obtener el título de Licenciado en Sociología en la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales de la Universidad Nacional Autónoma de México. 2009.

 

 

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