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Tenía 19 años y compré con uno de mis primeros salarios El cuarteto de Alejandría, de Lawrence Durrell, por consejo de Sergio Romano, que en Canal 11 hablaba de esta obra con enorme admiración.

Lo leí y quedé deslumbrado. Desde entonces, durante más de tres décadas lo leí una vez al año. Es la novela que más he releído. Mejor dicho, el conjunto de novelas, porque El cuarteto... se conforma de cuatro: Justine, Balthazar, Mountolive y Clea.

En Justine, el primer tomo de la tetralogía, Darley, un aspirante a escritor, conoce en Alejandría a la deslumbrante Justine "ojos como luciérnagas en la noche", esposa del poderoso egipcio copto Nessim Hosnani. Cae en el embrujo de esos ojos y se convierte en su amante. Lo es también de Melisa, prostituta tísica, capaz de una solidaridad más allá de etiquetas: "Si no tiene mujer cuando salga del hospital, llámeme, siempre vendré".

Mientras se desarrolla este amorío con Darley, Justine busca en los burdeles a la niña que tuvo con Arnauti, otro escritor. Van apareciendo otros personajes, el escritor famoso Ludwig Pursewarden; Scobie, un policía pederasta; Pombal, un diplomático francés, Mnejiam, el barbero, que se entera de todos los chismes y la sutil Clea, una pintora.

Las tres líneas argumentativas principales de la novela son la política, que nos narra la conspiración de los egipcios cristianos contra los ingleses, encabezada por Nessim Hosnani y su hermano Naruz; el aprendizaje sentimental de los personajes -especialmente de Darley- y el tránsito de ser aspirantes a artistas a creadores plenos que viven Darley y Clea.

Volvamos a la trama de esta novela. El triángulo de Justine con Darley y su marido (que después sabremos que es un triángulo, por decirlo así, que tiene más lados), va generando una enorme tensión.

Esta tensión desemboca en una fiesta en el lago Mareotis, en la que todos portan un dominó como el que se usa en los carnavales, Justine presta su indumentaria a Totó de Brunel, quien es asesinado. Se presume que querían matar a Justine, por ser infiel a Nessim. En forma paralela, aparece el cadáver de Capodistria en el lago. Justine se va de Alejandría.

El cuarteto... es un libro fascinante que describe como nadie la complejidad de las relaciones amorosas. Cuando terminé de leerlo por primera vez, lo primero que pensé fue cuánto debería haber vivido Durrell para escribir sobre el amor con tanta sabiduría. Veamos unas frases, extraídas de la memoria: "El amor une, luego separa; ¿cómo, si no, podríamos desarrollarnos?; "¿Cómo dejar de amar a los lugares que nos han hecho sufrir?".

Dedico esta serie de cuatro pequeños textos al escritor mexicano Hernán Lara Zavala, con quien me unen tres complicidades: la primera, nuestra fascinación por la mujer; la segunda, nuestra amistad con nuestro Maestro Juan García Ponce; la tercera, nuestra mutua fascinación por El cuarteto de Alejandría.

Hay una película: Justine, de George Cukor, con un elenco excepcional para aquella época: Michael York en el papel de Darley; Dirk Bogarde en el papel de Pursewarden; Anna Karina en el papel de Melissa; Philippe Noiret en el papel de Pombal y la bellísima Anouk Aimée en el papel de Justine.

Si sólo pudiera llevarme una novela a la isla desierta, mi elección sería El cuarteto de Alejandría. Léanla, vean la película, disfruten esta joya de la literatura, ahora que hay tiempo.