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En un día como hoy nacieron San Antonio de Padua (1195) y Fernando Pessoa (1888), quien creó los heterónimos -autores ficticios que poseen personalidad-. Los más famosos son el poeta panteísta Alberto Caeiro, el poeta clásico Ricardo Reis, el poeta futurista Álvaro de Campos, el poeta ortónimo Fernando Pessoa, el ensayista Bernardo Soares y Rafael Baldaya, el heterónimo astrólogo.

Si Rimbaud dijo: Yo ES otro, para mostrarnos que dentro de sí habitaba alguien diferente (una tercera persona dentro de la primera persona), Pessoa se convierte en una multitud. Astrólogo, determinó las fechas de nacimiento de sus heterónimos -autores nacidos de su imaginación- elaborando sus cartas astrales.

Quizá la mejor novela de José Saramago es El año de la muerte de Ricardo Reis. A Ricardo le avisan que se murió Pessoa. Vivía en Brasil, regresa a Portugal, tiene un amorío. Le quedan seis meses de vida sin su creador, tiempo durante el cual se le aparece Pessoa, que también tiene derecho a seis meses como fantasma. Al final Ricardo, cansado de la vida, se va con Fernando, su creador, rumbo a la muerte definitiva.

En el café Martinho da Arcada de Lisboa, al que iba Fernando, hay dos mesas que no se pueden usar... la de Pessoa y la de Saramago. He estado allí dos veces. Leamos a Pessoa, un poeta mayor.