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En estos días, vi circular en las redes las imágenes de una pantera cuidando a un cachorro jaguar, el encabezado decía: “Esta pantera adoptó un bebé jaguar”. Uno de mis contactos publicó dicha imagen preguntando ¿quién detecta el error? Al no ser capaz de detectarlo, me dispuse a leer los comentarios y descubrí de qué se trataba. Así que indagué un poco más y quiero compartir esta información con ustedes.

La familia de los felinos (Felidae) puede presentar una gran variedad de patrones en su pelaje: manchas, rayas, un color uniforme o rosetas. Estas variaciones son resultado de la evolución y les han brindado a estos felinos varias ventajas de acuerdo con el ambiente en el que se desarrollan. Por ejemplo, para camuflarse y poder atacar de forma más efectiva a sus presas.

Entre esta amplia diversidad en el patrón del pelaje de los felinos, existen algunas variaciones que son el resultado de mutaciones genéticas. Entre ellas tenemos el albinismo y leucismo, que se caracterizan por un pelaje de coloración blanquecina provocado por la carencia de melanina. Por otro lado, tenemos el melanismo, que se caracteriza por un exceso de melanina y esto provoca una coloración oscura en el pelaje. Esta condición se ha vuelto ventajosa para aquellos felinos de hábitos nocturnos y para los que habitan zonas donde la luz es escasa ya que les permite ocultarse mejor al momento de acechar a sus presas.

Varias especies de felinos pueden presentar dicha mutación, entre ellos está el Jaguar (Panthera onca). En este caso en particular, estamos hablando de un rasgo dominante, lo que quiere decir que se expresa y que tiene elevadas probabilidades de presentarse en sus descendientes; aunque si hondamos un poco más en las leyes de la herencia, podemos descubrir que hay una pequeña pero existente probabilidad, de que en las siguientes generaciones, un jaguar con melanismo pueda tener una cría sin esta condición, como lo observamos en la foto de la publicación.

Así que ahora sabemos que las comúnmente conocidas “panteras negras” no son otra especie de felinos, si no más bien, una especie ya existente como un Jaguar o un Leopardo (por ejemplo) que ha sufrido una mutación por deleción (pérdida de una fracción de su ADN), la cuál hace que produzca exceso de melanina (Melanosis) y ésta hace que tengan una coloración negra en el pelaje.

Así que el error en dicha foto es que se expresan de ellos como si fueran dos especies distintas, cuando no es así y es muy probable que el cachorro sea realmente su verdadero hijo.

Fuente: Rubio-Gutiérrez, Itzel Citlalli, Guevara-Chumacero, Luis Manuel Variación en la coloración y los patrones del pelaje en los felinos. Investigación y Ciencia [en linea]. 2017, 25(71), 94-101 [fecha de Consulta 3 de Julio de 2020]. ISSN: 1665-4412. Disponible en aquí.