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El fiscal de Morelos, Uriel Carmona Gándara, informó que son tres las líneas de investigación que se siguen en el caso del feminicidio de Ana Luisa Garduño Juárez, ocurrido hace una semana en el bar Apolo XI, donde un hombre ingreso al filo de la media noche y le dio tres disparos a la activista y defensora de los derechos de las víctimas.

En ese sentido, dijo que las líneas de investigación principales, aunque no se descartan otras, son que Ana Luisa fue asesinada como consecuencia de un intento de robo con violencia. Según las autoridades, la activista se encontraba en la caja del establecimiento, dado que el Apolo XI era un negocio familiar y que estaría haciendo el corte de caja a la hora del ataque.

La segunda línea de investigación se refiere a que el feminicidio tiene que ver con su lucha particular por conseguir justicia para su hija Ana Karen Huicochea Garduño, asesinada en 2012 en su domicilio. Es decir, que el agresor estaba relacionado con el feminicidio de su hija y que intentaba acallar sus reclamos y sus acciones de investigación que realizaba para localizar al presunto feminicida.

La tercera se relaciona con su trabajo como activista. Ana Luisa fundó varios colectivos para luchar por los derechos de las víctimas de la violencia, particularmente los feminicidios y las desapariciones. Al menos era dirigente del colectivo Ana Karen Vive y del Frente de Víctimas del Estado de Morelos. Hasta el momento, según el fiscal, no hay detenidos.

En tanto, el mecanismo de protección para el hijo de Ana Luisa, Martín Huicochea Garduño, fue incorporado al Mecanismo de Protección que le brinda ya medidas de seguridad, además de que recibirá apoyo para la reparación del daño, según informó la Comisión de Atención y Reparación a Víctimas.